

LOS FRENTES DEL FEMINISMO
En la justicia
Simone de Beauvoir
El opresor no sería tan fuerte si no tuviese cómplices entre los propios oprimidos
L
JUSTICIA PATRIARCAL
a justicia patriarcal nunca puede ser justa porque es una forma más de violencia contra la mujer, y en España, como en casi cualquier parte del mundo, la justicia es patriarcal.
La norma jurídica parte de una visión patriarcal y androcéntrica, y la falta de formación en materia de igualdad en quienes la interpretan, hace que las mujeres se sientan desprotegidas por la Justicia y por el Estado.
En los juicios por crímenes por ‘delitos sexuales’ suelen ser las víctimas quienes sufren un juicio paralelo, y de manera permanente se cuestiona su credibilidad, perpetuando así el machismo desde las instituciones de poder.
Las mujeres se enfrenta la incomprensión por parte de la justicia, que parte de la presunción de que existió consentimiento y pone bajo sospecha el grado de participación o de intimidación de la víctima para desacreditarla.
La Federación de Mujeres Jóvenes (FMJ) reivindica una justicia feminista para evitar sentencias como la de ‘La Manada’ donde se plasma “la incapacidad de los magistrados para distinguir entre consentimiento sexual y violación”.
El fallo del Tribunal Superior de Navarra (TSJN) condenó a nueve años de prisión a los cinco violadores de ‘La Manada’, por abuso y no por violación (agresión sexual con violencia o intimidación).
La federación considera que resoluciones como la de ‘La Manada’ normalizan la cultura de la violación, como solución proponen una “educación feminista” para que las instituciones y la sociedad identifique qué es violación y qué es consentimiento.
Casos como este, que no es aislado, ponen en tela de juicio la capacidad de la justicia para proteger a las víctimas y no a los agresores. Para terminar con la violencia institucional la magistrada Elena Rábade aboga por “la educación en igualdad de género”.
En este sentido discrepa la periodista feminista Cristina Fallará, quien asegura que a las personas adultas que han asumido el machismo estructural “ya no se les puede educar”, y añade “solo se puede imponer la ley”.